Nuestra pericia puede darle frutos
En First American Bank nos sentimos orgullosos de poder conseguirles los resultados deseados a nuestros clientes de diversos sectores. Esta es una muestra de los clientes que se han beneficiado de una asociación con nosotros.Dimos financiación a un desarrollador con experiencia para la construcción desde cero de un centro comercial de 190,000 pies cuadrados en Kissimmee, Florida. El crédito incluía la adquisición del terreno, mejoras de infraestructura, construcción vertical del esqueleto y construcción interior de cada una de las unidades a medida que se iban arrendando.
Un experimentado inversionista de hostelería consiguió el arrendamiento de un terreno en una importante ubicación de West Palm Beach, Florida. First American Bank le dio un crédito de construcción para que construyera un Canopy para 150 huéspedes cerca del Hilton Hotel. La facilidad de financiación incluía un período de solo intereses durante la construcción y estabilización de la propiedad e incluía una financiación mini-perm luego de la estabilización.
First American Bank financió la adquisición de un centro existente de autoalmacenamiento de 629 unidades en Riverview, Florida. La facilidad de financiación incluía un período de solo intereses para que el prestatario pudiera lograr la ocupación estabilizada y luego se le dio un período de capital e intereses luego de la estabilización.
First American Bank financió la construcción de una casa unifamiliar en Chicago. El avance fue del 80% de los costos con base en la experiencia del constructor, la ubicación de la propiedad y el precio de venta proyectado de la casa.
First American Bank ofrece tasas extremadamente competitivas por propiedades multifamiliares. Esta transacción tuvo una tasa fija a 15 años (con amortización a 15 años) para un edificio de 10 unidades en Chicago, con el objeto de permitirle al prestatario bloquear una tasa atractiva y que pagara rápidamente el crédito.
Un desarrollador industrial adquirió un atractivo sitio en Aurora, Illinois, y necesitaba una financiación flexible mientras pasaba por el proceso de derechos y comercializaba el sitio a un usuario final.
First American Bank estructuró una facilidad para que el inversionista pudiera adquirir un edificio de oficinas Clase A desocupado en Lake Forest, Illinois. La estructura de financiación le dio al prestatario tiempo suficiente para buscar a los usuarios finales adecuados sin el requerimiento de tener que hacer pagos de capital e intereses.
El soporte de financiación para esta compañía fue en cierto modo único, dada la estructura de compensación implementada para los empleados luego de la transacción. La fortaleza del negocio de esta compañía yace en los distintos talentos de sus empleados, por lo que después de que ayudamos a financiar el 100% de la compra de la compañía a través de un ESOP, la gerencia armó una combinación de garantías y acciones fantasmas para alcanzar el nivel de compensación para atraer y retener a personas talentosas. El éxito de la compañía forzó el aumento sustancial de precio de las acciones, y la obligación correspondiente asociada a sus acciones fantasmas, los primeros años del plan. Pudimos trabajar con la compañía durante la recesión para estructurar un adicional de $10,000,000 en financiación para flujo de caja para comprar una parte de las acciones fantasmas e interrumpir el crecimiento de la obligación, ahorrándole a la compañía millones de dólares en gastos de caja a futuro.
La base de empleados de esta compañía está conformada principalmente por personas con un alto nivel de formación, que desarrollan una cantidad sustancial de propiedad intelectual en el curso ordinario de su trabajo de consultoría. Además de tratar de financiar una transacción en segunda fase para llevar el ESOP de un accionista del 24% a un accionista del 69%, la compañía también buscaba conservar su flexibilidad de flujo de caja para seguir invirtiendo en múltiples líneas nuevas potenciales de negocios centradas en esa propiedad intelectual. La transacción inicial del ESOP se logró sin financiación bancaria. Sin embargo, la compañía ha crecido rápidamente desde entonces, lo que ha provocado un marcado repunte en la valoración total del negocio, así como la posterior financiación necesaria para la adquisición. First American Bank pudo ofrecer un paquete de financiación que le facilitó a la compañía la flexibilidad de flujo de caja necesaria para seguir invirtiendo en nuevas líneas de negocio y al mismo tiempo, darle al fundador un pago sustancial de caja el primer día.< /p>
Esta estructura de transacción del 100% del ESOP incluyó financiación de tres partes distintas: First American Bank, el accionista vendedor y un tercero prestamista intermedio. Era importante que el accionista vendedor recibiera cierto nivel de caja con el cierre que era superior a los estándares típicos de financiación bancaria sénior, por lo que era clave poder trabajar sin problemas con el tercero prestamista intermedio. Aunque agregar un prestamista adicional a la ecuación por lo general suma tiempo y costos sustanciales, pudimos conducirnos por el proceso de cierre puntualmente, no solo con el accionista vendedor, sino también con el tercero prestamista intermedio, lo que ayudó a asegurar que el expropietario pudiera recibir el pago de efectivo inicial necesario para completar la transacción y la compañía tuviera una estructura de deuda que le diera la capacidad de seguir triunfando en adelante.
La relación prolongada de First American Bank con este cliente empezó con la financiación del 82% de la compra de la compañía mediante un ESOP. Estructuramos la solicitud mediante la combinación de una facilidad de sweep de un pagaré a plazo y una línea de crédito para aprovechar los sólidos saldos de efectivo y flujos de caja de la compañía para eliminar la deuda del ESOP, lo que se logró sin necesidad de garantías personales de los accionistas vendedores ni la cesión de la propiedad de recolocación calificada. Esta estructura y el rápido pago de la deuda le dieron a la compañía la flexibilidad para financiar cinco adquisiciones en el curso de nuestra relación, para un total de más de $8,000,000, lo que le permitió a la gerencia seguir haciendo crecer el negocio.
La relación de First American Bank con este consultorio empezó hace varios años con la emisión de una facilidad de línea de crédito standby, como soporte crediticio para un bono gravable, cuyos fondos se utilizaron para comprar dos propiedades de consultorios/centro quirúrgico y los equipos correspondientes. La facilidad ha aumentado a medida que el consultorio se ha ido expandiendo y ha ido remodelado dichas propiedades. Con los años se ha modificado la estructura de amortización/pago para maximizar el flujo de caja a favor de los doctores. Además, dimos una línea de crédito para capital de trabajo y extendimos varios créditos a plazo para la compra de equipos, así como hipotecas personales para los doctores y asociados individuales. La deuda del consultorio tiene una estructura actual que no requiere garantías personales de los profesionales debido a la solidez del prestatario, el flujo de caja y la relación en general.
Esta solicitud de financiación vino originalmente de un consorcio de consultorios médicos interesados en una financiación de construcción y créditos finales para un edificio de condominios para consultorios médicos de múltiples áreas. First American Bank adaptó la estructura a cada crédito final para ajustarse mejor a las necesidades de flujo de caja de cada consultorio. Para los diversos consultorios médicos hemos emitido líneas de crédito para capital de trabajo, créditos a plazo para equipos y propiedades arrendadas, financiación del 100% de la compra de consultorios por parte de asociados nuevos, así como financiación para wealth management e hipotecas habitacionales para los doctores y asociados individuales.
Esta relación cubre tanto la parte personal como la parte profesional del bufete. Además de darle a la firma una línea de crédito para capital de trabajo, el banco también le dio líneas de crédito a cada uno de los socios e hipotecas habitacionales y cuentas personales a los socios y asociados. Asimismo, el banco maneja las cuentas de jubilación de los socios, estructurando los portafolios de inversión según sus necesidades individuales.
La financiación de la adquisición de esta desinversión se logró mediante la extensión a los compradores de un crédito a plazo a tal efecto, junto con una facilidad para capital de trabajo. En los años siguientes el banco también extendió financiación CapEx para ayudar con la expansión del negocio. La compra estuvo dirigida por un patrocinador independiente, junto a un tercero proveedor intermedio, que también coinvirtió capital.
La financiación para esta compra de acciones para tener una propiedad mayoritaria se logró mediante la extensión de créditos a plazo y una solución de créditos hipotecarios, además de una facilidad para capital de trabajo. La transacción estuvo dirigida por un patrocinador independiente, junto a dos prestamistas intermedios, que también coinvirtieron capital.
La financiación para esta recapitalización se hizo mediante un crédito a plazo y una facilidad para capital de trabajo. En los años posteriores el banco suministró fondos para ayudar con la recapitalización de dividendos. Esta es una buena historia de la flexibilidad y capital de deuda paciente del banco, que se ha utilizado para ayudar a respaldar el negocio durante la dura contracción económica. La compañía contó con el apoyo de un patrocinador, que le dio capital y deuda subordinada.
Se logró la financiación mediante un crédito a plazo y soluciones de créditos hipotecarios, al tiempo que también se le extendieron al negocio facilidades para capital de trabajo. Se utilizó el dinero para comprar los activos del negocio, junto con la refinanciación de la deuda subordinada existente. La transacción estuvo dirigida por un patrocinador, que aportó una deuda intermedia y capital. La financiación por el vendedor también hizo parte esta transacción.
Esta universidad privada de artes liberales utilizó un bono exento de impuestos para financiar seis proyectos de planes maestros en el campus, que incluían remodelaciones a los edificios, un nuevo campo de atletismo, la construcción de un nuevo centro de artes escénicas y diversos proyectos de ahorro de energía. Partes de la deuda que financió el campo de atletismo, el centro de artes y los proyectos de ahorro de energía se están pagando a 10 años con la recaudación de una campaña de capital y el resto se está pagando a 20 años con el flujo de caja operativo. Se retiró el dinero del bono en tres años y la amortización se basó entonces en el monto final retirado para cada proyecto. En general, la tasa de interés un 26% más baja permitió que la universidad lograra ahorros del valor presente de $750,000, en comparación con la financiación convencional, y redujera los costos del servicio de su deuda $70,000 anuales.
El banco trabajó con una escuela privada para refinanciar su deuda existente y financiar los costos de remodelación de un edificio de aulas. La parte de refinanciación del bono inició la amortización a diez años tras el cierre, mientras que los costos de remodelación fueron retirados durante un período de tres años y su amortización empezó cuando se pagó por completo la primera parte. Esta estructura permitió que la escuela incorporara en el bono gastos en capital a futuro. Se estructuró la deuda con una tasa fija que se reinicia periódicamente según una fórmula. En general, la escuela ahorró más de $600,000 usando la estructura de bonos de compra directa del banco y mejoró sus ahorros al incluir los gastos a futuro, en lugar de esperar para emitir un segundo bono.
Este proveedor de servicios comunitarios con 75 años de experiencia culminó recientemente la construcción de un centro totalmente nuevo de 60,000 pies cuadrados usando una deuda convencional. First American Bank propuso el uso de los bonos de compra directa para refinanciar el crédito de construcción de $5.3 millones y financiar la adición de un nuevo centro acuático de 30,000 pies cuadrados y $2.9 millones. El banco trabajó con nuestro cliente sin fines de lucro para estructurar los bonos, incluyendo la búsqueda de un emisor gubernamental, la selección de abogados especialistas en bonos y la coordinación de todo el proceso. La emisión de bonos a 20 años se hizo a una tasa flotante y el prestatario ejecutó un swap de tasa de interés a 10 años con el objeto de minimizar el riesgo de tasa de interés y dar certidumbre a sus flujos de caja. Los ahorros generados gracias al uso de los bonos exentos de impuestos redujeron sus costos de crédito en más de $125,000 anuales.
Este distrito escolar K-12 estaba interesado en aprovechar la caída de las tasas de interés, refinanciando su emisión existente de bonos de Obligación General. Sin embargo, los bonos actuales no eran rescatables por los siguientes seis meses y el nuevo proyecto de ley sobre impuestos había eliminado los reembolsos anticipados. First American Bank pudo ofrecer un compromiso con tasa a plazo para la compra de los bonos en una colocación privada que le permitió al distrito aprovechar las tasas más bajas sin tener que esperar los seis meses y arriesgarse a que aumentaran las tasas de interés. En consecuencia, el distrito redujo su tasa de interés efectivo en un 1.73% y alcanzó ahorros del valor presente neto de más de $840,000.
Un distrito de parques locales buscaba refinanciar sus bonos existentes de Alternate Revenue Source para nivelar el servicio de su deuda y aprovechar las tasas de interés vigentes más bajas. Los nuevos bonos tendrían un vencimiento final a 12 años con tres posibles estructuras: rescatables en seis años, rescatables en ocho años y no rescatables. También buscaba bloquear una tasa a futuro de tres meses. Mediante la compra directa de los bonos el banco pudo ofrecer una estructura con flexibilidad y ahorrarle al distrito más de $125,000.
Uno de los clientes municipales del banco buscaba incentivar a un desarrollador para que construyera una nueva urbanización de viviendas mediante la financiación de mejoras en el suministro de agua, alcantarillado y otras mejoras a la infraestructura. Junto con los abogados crearon un distrito de evaluación especial de impuestos que asignó los costos a la factura del impuesto a la propiedad de cada sitio habitacional durante 10 años. El banco entonces compró los Alternate Revenue Bonds, pagaderos con la evaluación especial de impuestos, pero también respaldados por un embargo de la obligación general. Esta innovadora estructura permitió que el desarrollador se comprometiera con el proyecto, con planes para 32 viviendas unifamiliares, 66 lotes dúplex y 16 condominios.
El fabricante utilizó nuestro programa de IRB de compra directa para comprar un centro de mecanizado grande para reemplazar cuatro modelos viejos. Adicionalmente, el nuevo centro de mecanizado generó las capacidades y eficiencias adicionales necesarias para respaldar el nuevo negocio. Se planificaron la inicial y los pagos de las cuotas al proveedor del centro de mecanizado con una venta de seis meses. La financiación cubría todos los costos involucrados, incluyendo el precio de compra, los costos de diseño y los costos de ingeniería, instalación y emisión. La capacidad de First American Bank de estructurar el IRB utilizando una característica de retiro (a medida que se va requiriendo el capital) con un período de solo intereses hizo de esta una inversión extremadamente económica. Nuestra capacidad de cerrar el acuerdo del bono en 45 días mantuvo el cronograma del prestatario para la puesta en marcha y operación del centro de mecanizado. El banco y el proveedor tenían financiación convencional disponible. Sin embargo, el costo de la financiación con el IRB generaba un descuento del 25% respecto de las demás opciones y más de $100,000 en ahorros de intereses durante el plazo a siete años del bono. El reintegro de los costos iniciales de la estructura del IRB se recuperó en nueve meses luego de la financiación completa del IRB. Finalmente, utilizamos un swap de tasa de interés a futuro para bloquear la tasa de interés del prestatario antes de la financiación.
Se utilizó el dinero de este bono de compra directa para financiar la adquisición de un terreno desocupado y construir un edificio de 100,000 pies cuadrados. La facilidad es propiedad de una LLC inmobiliaria y arrendada a dos compañías operadoras afiliadas. El proyecto permitió que las compañías operadoras expandieran su capacidad y habilidades para satisfacer la demanda de los clientes y más de $800,000 en ahorros de intereses por el bono, lo que les permitió mantener su competitividad, financiar sus necesidades de equipos esenciales y crear empleos adicionales. Se estructuró el IRB como un bono por retiros. No se financió el dinero hasta que se requirió para el proyecto, reduciendo así los gastos por intereses. Los bonos fueron de solo intereses durante el período de construcción de un año y luego amortizados a 20 años. Aunque los bonos tenían una tasa flotante, el prestatario ejecutó un swap de tasa de interés por una parte de la deuda para protegerse contra el riesgo de tasa de interés.
Hacía poco que esta panadería comercial había obtenido contratos para el suministro de productos a dos nuevas cadenas minoristas y necesitaba capacidad adicional para satisfacer la demanda. Planeaban comprar un edificio comercial existente de 56,000 pies cuadrados por $3,000,000 y luego invertir $1,500,000 adicionales en la remodelación. El banco propuso utilizar un IRB por retiros a 20 años, con pagos de solo intereses por 10 años, seguidos de una amortización a 10 años. Al mismo tiempo se aceleraría la amortización de la hipoteca de su centro existente para pagarla en 10 años, lo que permitiría que la compañía eliminara su deuda convencional de tasa más alta primero y maximizara el beneficio de la tasa más baja exenta de impuestos. Esta estructura única le generó a la compañía más de $400,000 en ahorros del valor presente neto y al mismo tiempo le redujo los costos anuales del servicio de su deuda en más de $35,000.
Por muchos años el negocio de este fabricante de dispositivos médicos se enfocó en la producción contratada para contratos a largo plazo. En los últimos años el modelo de negocio de la compañía se alejó de la producción contratada para atender rápidamente los pedidos sin la capacidad de asignar tiempo a una serie de producción específica.
Cuando la compañía funcionaba en series de producción contratadas, utilizaba un Programa de Capital de Trabajo para Exportación que le permitía la flexibilidad para financiar el capital de trabajo para cumplir los pedidos individualmente. Ese método le permitió a la compañía ofrecer distintos plazos a los compradores con base en el contrato. Como el modelo de la compañía cambió al cumplimiento inmediato, la necesidad de mantener un inventario permanente se hizo evidente.
Para respaldar este cambio, la línea de crédito bajo el Programa de Capital de Trabajo para Exportación migró a una combinación de una línea de crédito basada en activos para las actividades del día a día y una línea de crédito transaccional para los proyectos a largo plazo. El respaldo de la Administracion de Pequeños Negocios, Small Business Administration (SBA po sus siglas en inglés), y del Programa de Capital de Trabajo para Exportación permitió tener tasas anticipadas agresivas tanto para las cuentas por cobrar extranjeras como para el inventario.
La combinación de los métodos de financiación permitió que la compañía creciera y satisficiera las necesidades de sus clientes. La línea de crédito bajo el Programa de Capital de Trabajo para Exportación dio el soporte para una producción a gran escala que no se respaldaría normalmente bajo un modelo de crédito basado en activos. La línea de crédito basado en activos permitió que la compañía apalancara su inventario para generar el capital de trabajo necesario para producir y mantener una mayor cantidad de inventario permanente.
Este distribuidor era una compañía joven con experiencia considerable antes de arriesgarse por su propia cuenta. El problema es que tenía un capital de arranque modesto en una industria con algunos de los márgenes más bajos que cualquier industria. Para empezar, necesitaba un crédito que le permitiera pagarles directamente a sus proveedores para poder amasar un poco el negocio y calificar para facilidades más grandes.
Para salvar esa brecha First American Bank emitió una línea de crédito transaccional bajo el Programa de Capital de Trabajo para Exportación, diseñada para financiarse contra las órdenes de compra. Esto permitió que el banco financiara directamente a los proveedores de la compañía, lo que a su vez permitió que se enviaran los bienes y se le factura al cliente. Este proceso permitió, además, que el exportador empezara a crear un perfil crediticio con sus proveedores, lo que al final haría que la compañía se asegurara plazos con sus proveedores.
A medida que la compañía iba creciendo, First American Bank migró la línea de crédito transaccional bajo el Programa de Capital de Trabajo para Exportación a una basada en activos que permitió que la compañía aumentara su crecimiento. Esta migración también facilitó eficiencias adicionales dentro de la compañía, ya que los requerimientos de reporte no eran tan rigurosos como los de las estructuras transaccionales.
El respaldo bajo el Programa de Capital de Trabajo para Exportación ayudó a que el exportador obtuviera una estructura flexible de órdenes de compra al principio que no está disponible de inmediato en el mercado. A medida que siguió creciendo y capitalizó adicionalmente el negocio, el Programa de Capital de Trabajo para Exportación lo ayudó a hacer la transición a la una estructura de crédito basado en activos en un punto antes de lo que está disponible convencionalmente. Combinados, estos dos métodos permitieron que estos empresarios aprovecharan su experiencia en la industria y empezaran su propio negocio en una industria que se rige mucho más por su acceso al capital.
Un distribuidor de equipos pesados que vende maquinarias a las minas de todo el mundo necesitaba un crédito que le permitiera financiar las transacciones con plazos que fueran más allá de los plazos normales elegibles bajo las líneas de crédito con créditos basados en activos.
Entendiendo las necesidades únicas de esta compañía, First American Bank propuso una línea de crédito transaccional bajo el Programa de Capital de Trabajo para Exportación para ofrecerle al negocio una estructura de capital de trabajo que diera cabida la financiación de las órdenes de compra y a los plazos extendidos del comprador que exige la industria.
Trabajando con el emisor de créditos comerciales, el distribuidor pudo negociar una póliza de seguro que ofreciera plazos de hasta 360 días. Junto con la flexibilidad de la estructura del Programa de Capital de Trabajo para Exportación, pudimos extender la financiación con base en el costo de la orden de compra del proveedor, reconociendo al mismo tiempo el beneficio aportado por la póliza de seguro del crédito comercial para respaldar los plazos extendidos.
El modelo transaccional es donde brilla la flexibilidad de la estructura del Programa de Capital de Trabajo para Exportación. La capacidad de dar financiación para órdenes de compra es considerablemente beneficiosa, ya que la estructura es inherentemente más riesgosa por el hecho de que se extiende el capital antes de que se cree un activo (o una cuenta por cobrar en este caso). Así, el respaldo de la SBA permite el despliegue de esta financiación flexible. Al mismo tiempo la estructura permite que el banco administre el crédito con base en las necesidades individuales de cada orden, aparte de conforme a la elegibilidad global del crédito basado en activos.
Un fabricante de máquinas a la medida recibió una orden de compra de una empaquetadora grande de especialidad que tardaría aproximadamente seis meses en construir. El fabricante requería una inicial del 30%. Con este contrato el comprador requería que se garantizara la inicial con una garantía de pago anticipado. La garantía se haría en forma de carta de crédito emitida por el fabricante a favor del comprador, con el objeto de asegurar el pago de la inicial en caso de incumplimiento del contrato.
Es completamente razonable que el comprador pida la garantía del proveedor. El reto surge de la forma en que se pone la carga sobre el fabricante, en este caso. La inicial permite que el fabricante empiece la producción de la máquina y adelante el proyecto al punto en el que puede pedir otro pago o, en combinación con el capital existente, completar la máquina y requerir un retiro antes del envío.
Cuando un fabricante tiene que dar una garantía de pago anticipado, la carta de crédito que hay que emitir debe asegurarse para que pueda emitirse. Por lo general, se asegura la carta de crédito con el depósito inicial o con la disponibilidad de una línea de crédito basada en activos. En ambos escenarios el fabricante verá una reducción en su posición de capital trabajo por el plazo de la carta de crédito.
Para aprovechar la inicial y permitir que el fabricante la ponga a trabajar en la producción de la empaquetadora, EWCP y el programa SBA CAPLine permiten que se emita la carta de crédito con menos garantía colateral de la requerida en estructuras convencionales. Bajo cualquiera de los dos programas de la SBA y dependiendo de los términos del contrato, se puede emitir la carta de crédito con un 25% a un 50% de garantía colateral en efectivo, en lugar del requerimiento convencional de colateralización al 100%.
La posibilidad de asociarse con la SBA para esa emisión es uno de los aspectos más particulares de los programas EWCP y CAPLine. Los costos de emisión de la carta de crédito y los costos asociados al crédito de la SBA son a menudo mucho menores que los costos de préstamo con una carta de crédito. Así, hay ahorros inherentes generados por el uso de la inicial, en lugar de los fondos del crédito.
Un distribuidor de productos de temporada tiene contratos con varios almacenes grandes por todo Estados Unidos. Conforme a los plazos, los almacenes tienen plazos de pago a 90 días contados a partir del momento en que se reciben los productos, lo que representa el tiempo necesario para poner el producto de temporada en los estantes y venderlo.
Aproximadamente 90 días antes que se requieran los productos en los estantes de las tiendas, el distribuidor debe emitir las órdenes de compra a las fábricas en China, junto con una inicial del 50%. En total, el ciclo comercial de los productos puede ejecutarse prácticamente en 180 días. Cuando se manejan las órdenes de compra, no se trata de cuentas por cobrar hasta que se envían y, por lo tanto, no dan la garantía colateral a un prestamista que usualmente ve con una línea de crédito basada en activos.
Entendiendo el ciclo comercial de los negocios de temporada, First American Bank recomienda una CAPLine de temporada, uno de los usos de especialidad del programa SBA CAPLine. Bajo esta estructura pudimos financiar los pagos al fabricante según cada orden de compra hasta que el minorista hizo los pagos casi seis meses después.
Este distribuidor estaba en proceso de ampliar su cadena de suministro más allá de sus proveedores nacionales principales. Siendo una compañía en gran medida de exportación, ello significaba que una parte de las órdenes sería triangulada de proveedores extranjeros a compradores extranjeros. Tal es el caso cuando se empieza a trabajar con un nuevo proveedor, toma algo de tiempo establecer los plazos de pago. Por lo tanto, el distribuidor tenía que encontrar la manera de financiar sus órdenes existentes para generar la liquidez necesaria para pagarles a sus nuevos proveedores antes del envío.
Para hacer frente a este reto, First American Bank recomendó una CAPLine basada en activos. Parecido al EWCP de la SBA, el programa CAPLine podría estructurarse sobre una base de activos que permitiría que el distribuidor agrupara todas sus cuentas por cobrar elegibles como garantía de la línea. A diferencia del EWCP, el programa CAPLine no requiere que los productos sean exportados directamente desde Estados Unidos, lo que les permitió a los prestamistas implementar una estructura para respaldar las órdenes futuras, incluso las trianguladas.
Las órdenes trianguladas son un reto para la mayoría de los programas específicos de exportación como SBA EWCP o Express o EXIM Bank, puesto que no son elegibles como una “exportación nacional”, ya que no fueron enviados directamente desde Estados Unidos. En esos casos buscamos el programa CAPLine como una solución para las compañías involucradas en la triangulación. Todos los demás requisitos de la financiación se mantienen intactos, incluida la necesidad del seguro del crédito comercial.